martes, 24 de diciembre de 2019

Todos los colores

Blanco, como las páginas
de una vida que no promete nada,
que no engaña,
que se hace y se deshace
y se entreteje.
Verde, 
como esta tierra que amamanta
y nutre almas tormentosas,
grises y melancólicas.
Azul como los días laborables,
que se suceden
y no suceden,
parcos en hostilidades.
Amarillo por doquier,
para impostar una sonrisa.
Negros los pensamientos
que también florecen
cuando respirar es inercia
y no se paren versos
que merezcan la pena.
Cuando descubro un océano
entre tu vera y mi vera.
Rojo como los atardeceres
que incendian los vuelos compartidos
de aves peregrinas,
amantes del amor en el camino.
Rosa que me regalas a cuentagotas
y bendice el altar de un deseo
que sabe sanar,
que sana.
Violeta, cuando florezco.
Te quiero.

sábado, 2 de noviembre de 2019

No hay plazo que no se cumpla, ni deuda que no se pague

Celebérrimo estertor,
exabrupto final
de una vida insustancial
escrita en YO mayor.

Vinimos a hacer ruido,
gritaba,
a ser solo alarido,
a ser solo gemido.

Miraba en derredor
buscando penetrar
ávido de (a)humor
el umbral del más acá.

No moriré sin haber vivido,
decía,
adolescente,
apostando a ciegas su presente
ante un futuro siempre ausente
que solo promete olvido.

No era hedonista,
ni un conquistador empedernido,
más bien un trapecista
adicto a la adrenalina y al peligro,
un coleccionista de sueños,
un capitalista de libro.

Largo me lo fiais,
dicen que reza su nicho.


viernes, 1 de noviembre de 2019

Viento viejo

Nada calma la sed del náufrago
que quiso aprender a volar
y descubrió la soledad y una isla.

Somos monumentos al sarcasmo y la ignominia,
desafortunados ególatras en busca de un yo
que no sabe, ni quiere, respirar.

Somos mutantes estáticos,
seres de aire,
viento viejo.

Yo apenas llego a balbucir
y derrapo en cada verso,
intuyendo el silencio que me acecha.

Ni el laurel ni las cardenchas,
ni la rosa ni la espada,
solo atiendo al olvido.

Todo el tiempo del mundo
concentrado en un instante,
fugaz y terminal.

Toda esperanza aniquilada.
La sed impera.

miércoles, 9 de octubre de 2019

Joker

Admítelo,
también tú has soñado
con ver arder el mundo
con una cerilla en la mano.
Tampoco te sientes diferente
cuando caminas entimismado,
otro extraño intrascendente
rodando corriente abajo.
Solo sabemos reír.
Solo podemos reír.
A veces, lúcido, quieres ser gente
y ensayas una impostura
con aroma tenue de cualquiera;
a veces, sombrío, hueles sangre
y te entra un hambre
que te ciega.
Ellos son los otros,
y nosotros estamos aquí,
pintando muecas en un espejo
que siempre devuelve seres grotescos.
Y solo sabemos morir. 



martes, 1 de octubre de 2019

Aire

Permaneces en silencio,
equidistante,
con los pies clavados en el suelo,
petrificado,
un buen hijo de este tiempo cobarde,
otro ahogado.

Be cool,
la life is wonderful.
Pero los espejos solo te devuelven hastío
y ansiedad,
y por no tener
ni tienes ganas de llorar.

Qué arda el mundo,
piensas,
mientras te fumas otro canuto
que te condena
nuevamente al fracaso.

Al menos sabes 
que el universo no conspira
ni a tu favor ni en tu contra,
que el tiempo nunca perdona
y la dueña nunca avisa
ni sabe lo que vales.

Cierras los ojos y suspiras.

Después de todo, todo es aire.

domingo, 3 de marzo de 2019

Tigre

Tu cuento no termina mientras sigas respirando,
mientras sigas dibujando corazones en la arena
de una playa bañada por el sol,
de una noche alumbrada por la luna,
a sabiendas de que el tiempo llega siempre
implacable disfrazado de marea. 

Vivo aquí y vivo ahora,
no quiero saber de eternidades pasajeras,
no quiero probar amores para siempre,
no quiero nada,
nada salvo verte,
verte a salvo de endriagos y amadises,
verte libre, fuerte, valiente,
verte tigre,
verte cerca o verte lejos,
volando,
invencible.

Mi cuento es que sepas que respiro,
que a veces me pierdo
probando caminos,
que me siento extranjero impenitente
vagando por senderos
mil veces transitados,
pero nuevos.
Que respiro; que siento; que existo.

No te vistas de razones y argumentos,
mírate,
mírame,
y, si aún tienes valor, vuela y disfruta.

miércoles, 13 de febrero de 2019

Me gusta tu boca

Me gusta tu boca cuando dice,
y diciendo hace,
un mundo más limpio y más decente,
que mira a los ojos de la gente,
y no entorna la mirada por vergüenza,
cuando dice tequieros
que significan te quiero,
y no escatima adjetivos
que describen una sustancia,
sin juicio
y sin prejuicio.
Me gusta tu boca cuando besa
a tontas y a locas,
a diestros y a siniestros,
y la vida rebosa
de motivos para un verso.
Me gusta tu boca, traviesa, sinuosa,
cuando me busca,
cuando me toca
y mi deseo se hace agua
y tu saliva me desboca.

Amores pasajeros

Celebro enmimismado
el instante incandescente,
cuando te miro
y te descubro ausente,
viajando lejos,
con equipajes que declino averiguar,
cuando estás,
y no estás.
Bendigo con un verso
este tiempo que se instala
y se entrega impenitente,
sin más horizonte
que otro beso hurtado al sosiego.
Callo,
callo y te siento,
acurrucada y en paz,
y agradezco cada instante
en que, pudiendo volar,
vuelves de tus viajes,
me miras 
y me besas,
sin más. 

domingo, 27 de enero de 2019

El camino y la piedra

Palpo a tientas el destino más oscuro,
el aire quema las entrañas
y los sonidos reverberan
ausentes,
estamos solos.
Afuera llueve
y el agua siembra lágrimas
que anegan el futuro de pasado.
Anochece y amanece,
amanece y anochece.
Reconforta saber que somos polvo,
tiempo y polvo,
que no hay marcha atrás,
que no existe camino de vuelta.
Sigo adelante absorto en mí mismo,
golpe a golpe,
verso a verso,
y no me importa que estés muerto,
yo estoy vivo,
aprieto los dientes,
conjuro los miedos
y abro caminos.