miércoles, 6 de enero de 2021

El hilo

Todos los miedos se conjugan

cuando por fin comprendes

que vivir es morir,

que el porvenir no existe.

 

Entonces respiras,

aunque el aire que redime

abrase tus entrañas,

y aceptas el coste sobrehumano

que tiene soñar.

Y sueñas.

 

Después de todo,

solo existe este instante,

y es eterno

y absurdo,

como los recuerdos

que atesoras.

 

Una infancia lejana,

cristalizada,

llena de lugares comunes

y terrores contextualizados.

La verdadera patria.

La adolescencia

y las primeras ausencias.

El desamor.

La misma vieja historia,

repetida.

Los consabidos fracasos

y las pírricas victorias

que dibujan el halo

de cualquier vida

de esta noria.

Nada del otro mundo.

Pero tu mundo.

Tu movida,

tu historia.

Todo pendiendo de un hilo.

 

Y sonríes,

porque la promesa de una muerte cierta

solo confirma la vida

y el amor que aún respiras.