A todos y
cada uno…
Casi
todo es cuestión de palabras,
palabras
que crecen,
que
engordan,
que
naufragan o vencen,
palabras
que crean.
Con
vosotros he creado un diccionario,
juntos
hemos escrito
liberté, égalité,
fraternité,
hemos
cantado y contado pingüinos,
llorado
y reído,
hemos
erigido un monumento al olvido.
Vuestro
asombro ha sido el aire que respiro,
vuestros
triunfos mis atinos.
Seis
años después puedo decir que he aprendido,
con
vosotros,
cómo
se enseña a aprender,
qué
significa querer.
Estoy
agradecido.
Por
eso he decidido que no me despido,
que
esto no es un final, sino un principio,
que
voy a alegrarme viéndoos abandonar el nido
como,
en plan, pajaritos.
En
la memoria compartida brillarán los ibérica,
los
vamos a ver, con h y con b,
un
par de citas, y, con suerte,
alguna
salida de tono casi sin testigos.
Buena
suerte, buen camino,
aprovechad
el curso de vuestro río,
recordad
que el tempus fugit,
que
el mar siempre espera,
como
único destino:
no
por lo que la muerte os prometa,
sino
por todo lo vivido.
Os
quiero a pesar de todo,
a
pesar de todo os he querido.
Ya
no sois alumnos,
ahora sois amigos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario