jueves, 17 de agosto de 2017

Mirar hacia atrás


Todas las trompetas claman venganza,
y el clamor se hace sangre
que palpita y enardece,
que subleva y limpia
una voz destilada en desamparo.

No cambio de tema.
Sigo ajeno a un mundo que me ignora.
No queda tiempo para otro borrón
y la cuenta desborda impagos.
¿Quién lo iba a decir?

Mis nietos miran,
ingenuos,
condescendientes,
y no ven más que futuro,
y yo callo,
y casi otorgo.

A estas alturas el silencio se impone.
El tiempo se impone
y no queda otro remedio
que mirar hacia atrás.

Y todos los plazos se cumplen,
y todas las deudas se pagan.

Mis nietos hablan,
seguros,
hastiados,
y no veo más que pasado,
y yo callo,
y casi otorgo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario