miércoles, 7 de octubre de 2015

El mundo bajo el mar

Braceas entre la muchedumbre
buscando un sitio que permita respirar
y no encuentras más que alambre.
Y el abismo.

Cada instante es un juicio,
y solo es cuestión de tiempo
sacar en suerte ser culpable.
Y la pena siempre es capital.

Nadie nos enseñó funambulismo
y nos marean las alturas.

El camino no existe más allá
de aquí,
de ahora,
nuestras huellas se pierden
y las palabras se secan
en el cielo del paladar,
insípidas.

Las metáforas son también disfraz
de un amor infatigable
por seguir buscando el mundo
bajo el mar,
intoxicados por cantos de cisne y de sirena,
absurdamente dispuestos al naufragio.

Cierra los ojos gritando
¡Gerónimo!
y decide avanzar otro paso
aún perseguido por unas dudas
que enseñan los dientes,
que exhiben sus fauces.

Vivir es cosa de locos y valientes.

1 comentario:

  1. Buscar el camino, seguir adelante, nunca rendirse.
    Encontrarás a otr@s mirando el mismo abismo. A otr@s intentando que sus palabras forjen su destino.
    Conocerás a otr@s cuyos oscuros pasajeros son fieles compañeros de viaje. A otr@s que consiguen ver el camino más allá de las dudas, más allá de los miedos, más allá de la soledad.
    Aprenderás que respirar es mucho más que tomar aire. Y te perderás por fin en el fondo del mar.
    Vivir es cosa de locos y valientes. La vida misma es la recompensa. Deja ya de buscar.
    Un abrazo enorme!

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